El 9 de septiembre, Apple hizo su gran revelación de los iGadgets de este año: el iPhone6 y el iPhone6 Plus, el iWatch de 350 dólares y algo llamado Apple Pay, un sistema de monedero móvil. Si los monederos móviles ya te resultan familiares, puede ser porque eres una de las relativamente pocas personas que utilizan Google Wallet o Softcard (originalmente llamada Isis), que existen desde hace años.
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De hecho, Apple Pay llega tarde a la mesa, entrando en un campo abarrotado, aunque poco espectacular, al menos en lo que respecta a la adopción por parte de los usuarios. Pero las características distintivas de Apple Pay llevan a algunos comentaristas a calificarlo como un cambio de juego. Como dicen algunos, Apple Pay podría por fin hacer realidad los pagos móviles.
Seguridad
La tecnología que impulsa los monederos móviles se llama comunicación de campo cercano, abreviada como NFC. Básicamente, la NFC implica chips inteligentes y agitar, en lugar de bandas magnéticas y pasar el dedo. La NFC incorpora señales de identificación por radiofrecuencia (RFID) para transmitir cantidades limitadas de datos desde un dispositivo a un receptor situado a pocos centímetros. Si tienes un Passbook o una aplicación de Starbucks en tu smartphone o tableta, es posible que ya estés utilizando la tecnología NFC. (Radar tecnológico)
Los estadounidenses se han mostrado reticentes a adoptar los pagos móviles. Una de las razones es la seguridad, nombrada por el 46% de los encuestados en un estudio de Thrive como razón para no utilizar los sistemas de monedero móvil. Los tres sistemas de monedero móvil utilizan tecnología NFC y RFID. (Cornerstone)
Softcarddesarrollado mediante la colaboración entre AT&T, T-Mobile y Verizon, utiliza un PIN para mejorar la seguridad. Utiliza un «elemento seguro» (SE), una pieza de hardware que almacena información financiera encriptada. El comerciante no ve tu información financiera: ni números, ni nombres, ni nada. Está aislado del hardware y del sistema operativo de tu teléfono, y si lo pierdes o te lo roban, puedes desactivar la aplicación a distancia.
Google Wallet al principio utilizaba un elemento seguro, pero pronto se vio inmerso en una batalla con operadores como Verizon, que bloqueaban el acceso a él. Google dejó de dar soporte a los elementos seguros físicos en 2014 para utilizar en su lugar la emulación de tarjeta host (HCE), una solución de software supuestamente menos segura. Al igual que Softcard, Google Wallet utiliza un PIN para autenticar las transacciones. La aplicación se puede desactivar de forma remota desde el sitio web de Wallet.
Apple Pay incorpora un elemento seguro de hardware como Softcard, pero en lugar de introducir un código PIN, Apple Pay utiliza el Sistema TouchID que lee tu huella dactilar para autenticar las transacciones. Apple Pay crea un código de transacción único que encripta tus datos. Además, el comerciante nunca ve tu información financiera. Si pierdes tu iPhone, puedes suspender todas las transacciones de Apple Pay a través de la aplicación Buscar mi iPhone sin cancelar tus tarjetas de crédito.
Estas tres herramientas tienen características de seguridad similares, así que ¿quién destaca? Como Apple Pay se activa con el tacto, no es necesario abrir una app, introducir un PIN y navegar hasta una tarjeta o un cupón. Ni siquiera necesitas despertar tu pantalla, sólo tienes que acercar tu iPhone al lector sin contacto. Dejando a un lado la comodidad, es mucho más fácil cometer un fraude si conoces el pin de alguien que si utilizas su huella dactilar al comprar algo.
Apple Pay y Softcard utilizan un elemento seguro de hardware para almacenar las transacciones, lo que supone una ventaja frente a la estrategia de emulación de tarjetas de Google Wallet. Además, muchos creen que el iPhone o el iWatch serán más seguros porque Apple produce los teléfonos de Apple y todo el hardware que contienen, a diferencia de los muchos productores de Android, como HTC y Samsung.
Seguridad: La ventaja de Apple Pay
Experiencia de usuario
ApplePay se ha asociado con American Express®, Mastercard y otras instituciones financieras para crear versiones digitales almacenadas localmente de las tarjetas de débito y crédito de un cliente, eliminando potencialmente la necesidad de llevar CUALQUIER tarjeta.
Añadir tarjetas individuales a Apple Pay es muy sencillo: haz una foto de tu tarjeta con la cámara iSight de tu iPhone y se añadirá automáticamente a tu Passbook como tarjeta predeterminada, posiblemente utilizando la tecnología de reconocimiento óptico de caracteres (aún no hay confirmación al respecto). También puedes teclear la información de la tarjeta si lo prefieres, y se almacenará en tu Passbook. Además, si quieres utilizar la tarjeta de crédito ya configurada en tu cuenta de iTunes, puedes añadirla a Passbook simplemente introduciendo el código de seguridad de la tarjeta. Sin embargo, en cualquier momento puedes cambiar tus preferencias de pago y la tarjeta utilizada a través de Passbook.
En las transacciones normales, cada vez que entregas tu tarjeta de crédito o débito para pagar, tu número de tarjeta y tu identidad son visibles para el cajero. Pero con Apple Pay, en lugar de utilizar los números reales de tus tarjetas de crédito y débito, se asigna un Número de Cuenta del Dispositivo único, cifrado y almacenado de forma segura en el Elemento Seguro, un chip dedicado en el iPhone. Estos números nunca se almacenan en los servidores de Apple. Y cuando realizas una compra, se utiliza el Número de Cuenta del Dispositivo junto con un código de seguridad dinámico específico de la transacción para procesar tu pago. Así, tus números reales de tarjeta de crédito o débito nunca se comparten con los comercios ni se transmiten con el pago.
En cambio, con Google Wallet y Softcard, el proceso de configuración lleva más tiempo e implica varios pasos, aunque el proceso es similar. Una vez iniciada la sesión en tu cuenta de Google, debes introducir tus datos personales y de facturación y guardarlos, y luego visitar un sitio web distinto para continuar el proceso. Allí, tienes que introducir más información, antes de descargar la aplicación para completar el registro. Afortunadamente, Google Wallet también te permite hacer una foto de tu tarjeta para añadirla (de forma similar a Apple Pay), pero Softcard se queda atrás en este aspecto. Sólo una vez que hayas configurado un número PIN puedes empezar a añadir tarjetas de crédito específicas a la propia aplicación… a través del sitio web de la entidad financiera.
Así, aunque Google Wallet y Apple Pay requieren que almacenes la información de tu tarjeta de crédito en algún lugar (iTunes o Passbook en el caso de Apple y la cuenta de Google en Wallet) Apple Pay parece ser más seguro con las transacciones, ya que tus compras se mantienen «privadas». Apple no almacena los detalles de tus transacciones, por lo que no pueden vincularse a ti. Tus compras más recientes se guardan en Passbook para tu comodidad, pero hasta ahí llega. En Google Wallet, aunque tu crédito/débito original no se muestra al comerciante, se le muestra una «tarjeta virtual» temporal. Aquí hay una ligera ventaja para Apple Pay.
Además, como nunca tienes que mostrar tu tarjeta de crédito o débito en el punto de compra, nunca revelas tu nombre, número de tarjeta o código de seguridad a nadie. Esto es una gran ventaja para mucha gente a la que le preocupa la privacidad.
Gracias a TouchID, la experiencia de usuario de Apple Pay es perfecta y segura. El iPhone 6 te reconocerá y autenticará basándose en tu huella dactilar en cualquier compra en el punto de venta, donde sólo tienes que colocar tu dedo en el sensor Touch ID con tu iPhone cerca del lector sin contacto, y se enviará tu pago. Incluso con los pagos dentro de las aplicaciones que aceptan Apple Pay, basta con un toque para autenticar, verificar y realizar el pago. Esto es lo más sencillo que se puede hacer.
Experiencia de usuario: Ventajas de Apple Pay
Disponibilidad de los comercios
Apple ha anunciado que también se ha asociado con comercios de alto nivel, como Subway, Disney, Walgreens, Macy’s, Sephora, Whole Foods, McDonald’s y (duh) Apple Stores. Compra en cualquiera de estos establecimientos y paga tus compras directamente a través de ApplePay, sin necesidad de tarjetas de crédito ni PIN.
Softcard no lo ha hecho mal a la hora de contratar a comerciantes, firmando acuerdos con pesos pesados como Aeropostale, Toys R US, Coca Cola y operadores de telefonía móvil como AT&T. Google Wallet se ha quedado atrás en este ámbito, entre otras cosas porque hace años T-Mobile y Verizon bloquearon la aplicación en sus teléfonos en favor de Softcard hace años.
Aunque todos los actores han anunciado el apoyo de algunos minoristas de renombre, es en última instancia una victoria para todos. Ninguno de estos comercios utiliza una tecnología de punto de venta propia que sólo admita uno de estos servicios. Todos utilizan lectores de tarjetas fabricados por empresas como Verifone que adoptan la NFC como estándar. La tecnología es la misma y está abierta a todos. Cuantos más comercios se sumen a la NFC, más se impulsará la NFC para todos.
Disponibilidad de los comercios: Ventaja – Es una victoria para todos
Compatibilidad
Con todas las ventajas de Apple Pay, parecería inevitable que Apple acabara haciéndose con el mercado de los monederos móviles. Pero esa conclusión descarta la abrumadora ventaja de Android (y potencialmente, de Google Wallet y Softcard) en el mercado móvil.
Muchos de los dispositivos de Apple carecen del hardware necesario para ejecutar Apple Pay o cualquier monedero móvil NFC. Esto incluye el iPhone 5 y los todavía nuevos iPhone 5C y iPhone 5S, así como todas las versiones del iPad, por no hablar del iPhone4S o incluso de modelos más antiguos. Esto deja a la gran mayoría de los dispositivos móviles sin la funcionalidad de Apple Pay. También obliga a los usuarios actuales, que probablemente hayan comprado el iPhone 5S o 5C hace menos de un año, a actualizarse si quieren la tecnología.
Android lleva mucho tiempo en el mercado de los pagos móviles, y la lista de dispositivos con capacidad NFC es cada vez mayor. Muchos de los usuarios actuales de Android tienen la opción de cambiar su tarjeta SIM actual por una mejorada con capacidad NFC (si no la tienen ya). Así que, aunque los usuarios de iPhone tengan que esperar un poco más, la mayoría de los usuarios de Android pueden probar el tap-and-pay ahora mismo.
Compatibilidad: Ventaja Google Wallet y Softcard
Aún así, nada puede sustituir a tu cartera por completo
Existe la pequeña cuestión de cómo utilizar los pagos móviles si la batería de tu smartphone se agota. ¿Qué pasa si se te cae el smartphone y lo haces añicos? Y aunque puedes borrar tu dispositivo si lo pierdes o te lo roban, eso también borra prácticamente tu sistema de pago por móvil, al menos hasta que lo instales todo en un nuevo dispositivo.
Para ser justos, todos los monederos móviles comparten estos últimos puntos débiles. No hay un verdadero ganador aquí, aparte de un monedero real y vivo.
¿Quién gana? Apple Pay
En general, todos hacen lo mismo y utilizan una tecnología similar, pero debido a la superioridad de Apple Pay en cuanto a seguridad y experiencia de usuario, tenemos que decir que es el ganador. Si a finales de este año la comodidad de los pagos móviles se convierte por fin en una «cosa» para las masas, lo más probable es que sea porque Apple Pay lo ha hecho.
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